NOS PASA DESAPERCIBIDO

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NOS PASA DESAPERCIBIDO

Respirar es vivir, es amar.
Y toda la naturaleza tiene vida,
hasta las piedras degeneran y cambian
con el permiso del viento y la lluvia.
Pues en mayor o en menor medida
todo sufre, todo se alegra y todo ama.
El mismo musgo que crece sobre las piedras,
o la verde hombría de los troncos del bosque
nos dan muestras de vida.
La enredadera se agarra a la pared fría
y se eleva hasta saltar los muros que la esclavizan.
Infinidad de microorganismos pululan
alrededor de nuestros cuerpos;
ellos también respiran y viven en alerta
acechando nuestros descuidos
para impregnarse en nuestra vida.

Elda 11 Enero 2019
Jesús Gandía Núñez

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