MONTAÑAS DEL ORDAL

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MONTAÑAS DEL ORDAL

Montañas heridas por canteras

que se esconden entre pinos resineros

y multitud de carrascas y madroños

que en otoño pintan bellotas y frutos rojos

Lugar donde se respira a tomillo

y se eleva al caminar el aroma a hinojo;

mucho más escondidos están los hongos,

que habitan entre el musgo y la carrasca

y provocan al aficionado senderista

una búsqueda difícil y desesperada.

A pesar de que estas montañas

siempre han sido un hábitat del robelló,

ahora ante tanto buscador,

es tarea muy difícil llenar el zurrón.

Pero es un gozo pasear por estas montañas,

tan solo con la observación del panorama

se llena el pecho de emoción y calma

sobre todo si ves salir el sol por la mañana.

Mi reencuentro con la montaña,

aunque haya sido por fácil senda y escasa,

me ha servido de cura placeba y deseada,

que ha llenado mis sentidos de añoranzas.

Vallirana 4 Octubre 2020

Jesús Gandía Núñez