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Corría en Barcelona el año 69 del pasado siglo,
sugestiva cifra para una relación amorosa,
yo acabando la mili en Mallorca
y ella de Granada recién llegada.
Tuve unos días de permiso
y trabajé para ganar unas perras,
coincidiendo con ella en la misma empresa,
cautivándome su aire fresco y
su amable presencia.Se hicieron los encuentros asiduos y entrañables,
hasta que tuve que regresar a la isla,
donde a los tres meses me licenciaban
reanudamos la relación interrumpida.
reanudamos la relación interrumpida.
Pero la alegría fue muy escasa
y de nuevo el destino nos separaba,
yo inicié mi aventura en Elda
y la relación se volvió epistolar y poética.
Durante más de un año volvimos locos a los carteros
y raro era el día que no nos traían noticias.
Por fin tomamos una decisión seria,
y yo con toda mi energía,
arriesgué mi andadura contigo, por tierras Alicantinas,
arriesgué mi andadura contigo, por tierras Alicantinas,
como la que se lanza al mar
desde la mas alta roca,
solo... con el amor por salvavidas
y la sombría duda, de que todo lo desconocía.
Aunque han pasado más de 46 años
y dicen que el amor se deteriora
nosotros le damos consistencia,
con la receta de los primeros días,
recurriendo… al hechizo de la
poesía.
Pues qué mejor momento,
para pedirte ante la audiencia,
que dure cien años y un día
este amor tan hermoso
aderezado… con la diosa poesía.
Elda 6 Febrero 2019-Jesús Gandía Núñez
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