1729
PROTECCIÓN
FÉRREA
Se
cuelan como intrusos
los
tímidos rayos de luz
a
través de la pequeña ventana
que
oxigena tu estancia.
Ellos
tienen la libertad
de
adentrarse en tu intimidad,
mientras
yo me desespero
por
convertirme en uno de ellos
y
deslumbrarte cada mañana
interrumpiendo
tus sueños
apoderándome
de la sonrisa
que
al amanecer lanzas al cielo.
Sin
embargo son el recelo y la soledad
por
pasados y tristes desamores,
los
que hacen que cierres la ventana
prohibiendo
a los rayos y al amor
que
lastimen la estabilidad de tu cuerpo.
Elda
5 Octubre 2021
Jesús
Gandía Núñez
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