ARMA DIABÓLICA

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ARMA DIABÓLICA

Ella sabía su punto débil.

Eran los perfumes y los aromas,

por ahí podía conquistarlo.

Y dio comienzo a su caza.

No se conformó con el asedio

de forma improvisada.

Urdió un plan estratégico,

y lo llevó a cabo a la práctica.

Se informó bien de sus recorridos,

estudió sus movimientos diarios,

lo siguió, oculta en la sombra,

hasta que supo dónde atraparlo.

Ya lo tenía todo planeado,

adquirió un caro perfume exótico

y se hizo con él la encontradiza

prácticamente a diario.

Él, sin apenas percibir el engaño,

fue absorbiendo el perfume endemoniado;

dependiendo cada vez más de su hechizo,

y esperando con agonía el aroma deseado.

Ella había trazado la jugada perfecta;

por fin lo tenía en sus brazos.

Reto conseguido, solo restaba, abandonarlo.

Ése debía ser su siguiente paso,

pero el amor no siempre podemos controlarlo.

Durante su época de escuela

ella le quería y él no le hacía caso

y por eso conjuró esta venganza.

Ahora, ella misma había caído en su trampa;

se acostumbró a sus caricias y a sus palabras,

y le pareció su actuación tan indigna,

que cedió ante la pasión desbordada.

vio su amor supeditado al poder del perfume,

para tener a su amado encadenado,

y jamás fue capaz de cambiarlo

ni de confesar el secreto que utilizaba.

Elda 5 Junio 2020
Jesús Gandía Núñez