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DESPIDIENDO ABRIL CON EL TRINITARIO
Sopla el viento de
levante,
provocando un leve
sonido de fondo,
que unido al delicioso
canto de los pajarillos,
son las únicas
notas musicales
que nos acompañan,
Trinitario amigo.
Suficientes, tu
paisaje y mi presencia:
tus solemnes
roquedos allá arriba,
dominando el Valle
y su contorno,
y aquí en el pinar,
ensombrecido por
tu belleza,
mi escueta y
encogida figura,
que ya apunta a
derrota.
De vez en cuando
se escucha,
por el sendero que hay a media altura,
a dos jóvenes que
pasan corriendo,
sin parar de darle
a la lengua,
o a un padre con
su hijo en bicicleta,
queriendo que el
niño,
emule sus tontunas.
Plácido, en éste
banco, bajo su media caseta,
disfruto de mi
mirador privilegiado,
donde recuento los
últimos pinos plantados
y deduzco que ésta
primavera,
cayó otro, víctima
supongo,
de la
“procesionaria” mal tratada o descuidada.
Trinitario 29
abril 2022
Jesús Gandía Núñez
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