Soplan vientos seductores,
vientos que envuelven, vientos que abrazan,
vientos que preceden a la calma.
Yo quiero subirme a tu grupa viento amigo:
llévame ligero contigo
hasta el lugar más exquisito;
donde abarque con la vista
todas las montañas y montículos,
donde las crestas recortan los abismos;
convirtiéndose en dueños del mundo.
Llévame viento peregrino,
hasta el confín de los orígenes,
quiero ver como era el planeta
antes de las miserias que produjimos.
¡Hay viento, testigo de agravios e injusticias!
¡Dime!... ¿Por qué las consentimos?
Elda 16 de Julio de 2018
Jesús Gandía Nuñez
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