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BESOS Y ABRAZOS PENDIENTES
Sigo anotando los abrazos
perdidos,
los besos que no he dado,
las tertulias con los amigos,
las conversaciones con la
familia.
Ahora si que distingo lo
virtual
de lo presencial y físico,
lo de que “el roce hace el
cariño”,
y que “corazón que no ve no
llora”.
Cuando todo esto se acabe
me pondré al día de todos
ellos,
no dejaré títere sin abrazo
y mis besos serán dardos de
fuego.
Dejaré de mandar abrazos y
besos
a través de las ondas y del
espacio,
y de “codearme” con los amigos,
estrecharé muy fuerte y con cariño
a mis hijos y a mis nietos-
Necesito el contacto físico
tanto como el aire que mal
respiro,
y quitarme de la boca
ese filtro que me amordaza,
antes que mi corazón agonice,
oxidado y sin caricia de consuelo.
Elda 26 Agosto 2020
Jesús Gandía Núñez
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional.
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