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LA
VOZ DE LA EXPERIENCIA
Cada
vez que miramos atrás
nos
damos cuenta de los errores cometidos,
de
las palabras que sobraron,
de
las que no dijimos.
Cada
vez que blanquean las canas,
percibimos
con más claridad
que
la precipitación es mala,
y
que la ira se cura con una dosis de calma,
que
casi todas las guerras
se
han gestionado por momentos de cólera,
o
por fatídicos sueños de gloria,
sin
pensar en las víctimas de ambos bandos.
Si
dejáramos reposar las reflexiones
y
las conciliáramos,
conseguiríamos
rebajar tensiones
y lograr especiales acuerdos.
Elda
4 octubre 2022
Jesús
Gandía Núñez
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