Chuspamontes,CEEmontes

jueves, 30 de abril de 2020

ALGO BUENO HA SUCEDIDO




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ALGO BUENO HA SUCEDIDO

Las montañas curaron sus heridas,
cubrieron de hierba los senderos,
y descubrimos a los culpables
de la erosión por la que sangraban.
Éramos los humanos, los salvajes,
que atropellábamos sin decoro,
y destruimos parte de la naturaleza
obviando todo lo que se nos daba.
Ha venido una paloma de colores,
pintada por su amo, a dejarme claro,
que no puede destruirse la belleza
que es fundamental para la existencia.
Y lo único que detesto del encierro
es el sufrimiento por los muertos;
pero me abrió los ojos a la ignorancia
que se halla oculta en nuestra soberbia.
Desde casa observo el verdor intenso
que nos muestran las montañas,
la calidad del aire que respiramos
y me preocupo de la gente que más amo.

Elda 30 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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miércoles, 29 de abril de 2020

ECHÉ RAÍCES



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ECHÉ RAÍCES

Hace más de mes y medio
que estoy a la sombra,
a los pies del ciprés de la terraza,
convirtiéndome en vegetal con ramas,
que da la bienvenida a la primavera.
Siento el frío el calor y el viento,
igual que cualquier otra planta,
y mi cuerpo se está volviendo verde.
Con las últimas lluvias primaverales,
me parece estar anclado a una maceta
y miedo me da de mirarme las piernas
pues creo que se hicieron más largas
y la savia circula por ellas.
Me parece que la desescalada llegó tarde,
y tendré que seguir a la sombra
del ciprés que me cobija, 
sin otras pretensiones…
pues me encuentro sujeto a sus raíces
y no permitirá mi salida, ni en la primera
ni en la última fase de la desescalada.
No sé si quejarme o estar alegre,
porque para qué quiero libertad de movimientos
si mis piernas ya no me respetan.
Seguiré desde el mirador, haciendo palmas,
hablando a diario con las plantas
y disfrutando del exultante colorido,
que nos ofrece la estación nueva,
a la que llamaré “Providencia”
porque la pedía a gritos la naturaleza.

Elda 29 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez


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martes, 28 de abril de 2020

NOS TILDARON DE INCOMPATIBLES


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NOS TILDARON DE INCOMPATIBLES (Trabajo sobre la pasión)

Hace 10 años nadie habría dado un céntimo por nosotros. Nos habíamos conocido por internet. Vivíamos en ciudades distintas. Tú ordenada y yo anárquico. Al cabo de unos meses la pasión nos desbordaba y nos fuimos a vivir juntos. Yo abandoné a mi familia y mi trabajo e iniciamos este nuevo camino. La vida nos sigue sonriendo y a pesar de las dificultades todo lo hemos superado.

En ti encontré la horma de mi zapato, el GPS que me llevó por la buena ruta. Ahora me siento emperador del hogar que compartimos, gracias a la pasión que como un tsunami desbordas. Todos erraron en su pronóstico de que éramos incompatibles, como el vino y la lejía.

Elda 20 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez


OCULTO EN LA BUHARDILLA





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OCULTO EN LA BUHARDILLA

Tengo en la memoria
una buhardilla mágica
con dos ventanas y vistas:
una de recuerdos del Pirineo
y otra que a los Alpes reivindica.
Hoy quiero asomarme
a esta última. Y volver a pasear
por las calles de Iseltwald:
con sus tejados naranjas,
su embarcadero de fantasía,
sus montañas color verde oscuro,
el delicioso parque infantil de recreo
su lago Brienz con sus azules aguas,
rodeado del verde claro de sus prados
y embellecido por preciosas tallas.
Recuerdo mi sentencia de ese día,
tras aquel improvisado encuentro,
“Si alguna vez me pierdo, buscadme
en este idílico pueblo de Iseltwald”
Y no lo pensé ni un momento,
confieso que lo secuestré
y lo tengo en mi buhardilla.
Siempre con la ventana abierta
bien aireado y dándole el solecito,
como se merece, el pueblo…
con más encanto de Suiza.
Pero por favor no lo digáis a nadie,
se podría romper la magia, si se masifica
este lugar plácido y tranquilo,
donde hasta la soledad es divina.
Y quedaría triste mi buhardilla
con una sola ventana de compañía
tras tantos años compartiendo vistas
desde este refugio de mi memoria.

Elda 28 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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lunes, 27 de abril de 2020

MEJOR, APOYO Y APLAUSO



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MEJOR, APOYO Y APLAUSO

Hay gente cegada por la envidia,
sin querer reconocer méritos ajenos
de conocidos o compañeros
que los consiguieron con esfuerzo.
Continuamente nos miramos al espejo,
como lo hacía la bruja del cuento;
con la mirada, puesta en nosotros...
siempre esquiva con el compañero.
Intentemos dar el máximo aliento,
para que otros consigan su sueño;
alabemos su éxito sinceros,
dándoles nuestro apoyo sin medida.
Difundamos lo mejor de ellos,
compartiendo su mérito,
para que no decaiga su empeño
reconociendo su valía.
El éxito de mis amigos, lo hago mío,
y de ellos bebo y me alimento.
Porque su triunfo es para mí alegría
y siempre… me dejará satisfecho.

Elda 27 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez


domingo, 26 de abril de 2020

¡QUIÉN TUVIERA ALAS!




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¡QUIÉN TUVIERA ALAS!

Dos mirlos se acoplan y penden
en equilibrio sobre el filo de un cable,
sorprendidos del silencio en la calle;
y la escasez de vehículos que pasan.
Intensifican su constante canto,
creyéndose dioses del hábitat,
dominadores desde su atalaya
y en ausencia de ruidos que amenacen.
En su trinar, transmiten beneplácito
sosiego de calma, un bienestar de paz
que nos relaja, y que necesitamos
para poder soportar tan enorme carga.
¿Quién fuera mirlo y volara,
quién pudiera estrenar alas?
¡Volver a la libertad de antaño!
¡Y sobrevolar esta manada de alimañas!

Elda 26 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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sábado, 25 de abril de 2020

CUENTO DEL LIBRO QUE ME LLAMÓ LA ATENCIÓN




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CUENTO DEL LIBRO QUE ME LLAMÓ LA ATENCIÓN

Como todas las mañanas
me senté en mi balancín
y cuando me puse a escribir,
una voz llamó mi atención.
-¡Eh, eh, si, es a ti, grandullón!
¿No recuerdas que día es hoy?-
Me giré, pero no vi a nadie,
allí estaba solo yo…y mis libros.
Y volví a oír el pequeño grito:
-¡Eh, eh ¡ Estoy en la estantería,
y te digo que hoy no toca escribir,
que es el día del libro y me toca salir.-
-¡Vaya! Qué susto me diste
alzando tu voz; ahora estoy contigo.-
Me levanté y cogí el pequeño libro,
mas bien parecía un viejo pergamino.
Me extrañé pues antes no lo había visto,
sería el único de mi biblioteca que no conocía,
pues todos los libros los había leído;
seguro que mi mujer lo trajo del rastrillo.
Cuando lo abrí y empecé su lectura,
me pareció un libro lleno de ternura,
con la magia de un escritor de bandera,
y a cada hoja, la voz se mostraba agradecida.
Me llegó a contar su enorme desdicha:
“por viejo y mala presencia,
hacia años que nadie lo leía,
y tuvo que alzar la voz desde la estantería.
¡Que hoy era el día del libro!”
y los dos nos abrazamos con enorme alegría.

Elda 23 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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EL LIBRO, FUENTE DE SABIDURÍA


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EL LIBRO, FUENTE DE SABIDURÍA

Cuentan los buenos libros
historias de amor y tristeza,
crueles o fantasías bellas,
que alivian nuestras penas.
En lecturas a deshoras, u horas muertas,
leemos historias de gnomos y brujas,
de guerreros que por la libertad luchan
o de los misterios de las estrellas.
Mi libro de cabecera también denuncia:
atropellos, que aclaran dudas,
de líderes que se vanaglorian
de sus actitudes deshonestas.
De todos los libros recojo, el poso
que dejó el alma, de quien los escribiera;
se produce una inmaterial transacción,
que minimiza nuestra innata ignorancia.
Solo la escasa capacidad de memoria,
limitará el techo del saber, o la línea roja
de todo lo que almacenemos
en la biblioteca de nuestra azotea.
Nadie es capaz de mostrarse inteligente
a base de pasteles y hamburguesas,
sino de alimentarse de excelentes obras,
que crearon los grandes escritores y poetas.

Elda 24 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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DESESTRESADOS



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DESESTRESADOS

Estoy desempolvado frases
que olvidamos en el trastero.
Por ejemplo “¿Nos vamos de vinos?"
o “tengo reunión con los amigos”
Pero son tantas esas frases,
que intentaré hacer una pequeña lista:
“ Lo siento tengo prisa, me esperan"
“Ahora no puedo, se me hace tarde”
“Llame usted mañana, que hoy es imposible "
“Menudo marrón en la carretera "
“Me voy corriendo que salen los niños"
“¡Vecina! ¿Te vienes de tiendas?”
“¿Dónde vamos este fin de semana?”
“¿Te vienes de excursión a la montaña?”
“¿Para cuándo el próximo certamen?”
“Mira que pelos llevo, tengo que ir al barbero”
“¿Estoy estresado, me voy a tomar una tila?”
Incluso, “Tengo una cita en el ambulatorio"
“Esta noche hay reunión de escalera"
“Me he encontrado a tres amigos en el camino”
“Los lunes estoy reventado del trajín del domingo”
“Se ha muerto Pepico… y me voy al tanatorio"
“Luego nos vamos al bar a ver el partido”
Y “Mañana madrugaremos, que salimos de viaje”
La lista podría llegar a ser interminable.
Pero termino con lo que más necesito:
“Me voy a tomar el aire, que me oxido”


Elda 25 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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viernes, 24 de abril de 2020

RUIDOS DE ALTURA



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RUIDOS DE ALTURA

Son sonidos que escucho en la azotea;
con los ojos cerrados, desde aquí arriba,
se oye una moto en la lejanía,
pero cerca, continuos ladridos me martirizan.
Se han convertido en este confinamiento,
los perros, en seres privilegiados de primera,
y gracias a ellos lo son también sus dueños,
que pueden salir cuando quieran.
Aquí muy cerca de mi azotea, compiten
de forma angustiosa, un perro y una cotorra,
el perro ladra y la cotorra le contesta,
y así pasan horas sin que nadie les reprenda.
En la esquina de arriba, está el macho alfa,
que es el dueño de la manzana;
cada vez que pasea un perro por la calle,
le amenaza, con ladridos como si lo devorara.
Menos mal que también hay armonía,
de dulces gorriones que revolotean,
y no quiero olvidar el zumbido de las abejas
que laboran sin descanso entre las plantas.
De tanto en tanto el motor de un coche cruza la calle
lento sin prisa, atemorizado por el perro alfa
y entre campanadas que marcan las horas,
me amodorra, la suave brisa que me acompaña.
Las tardes son algo más tranquilas,
hasta que a las ocho nos da por hacer palmas
y suenan las sirenas que revolucionan al vecindario,
para terminar la tarde con "Resistiré del “Dúo Dinámico”

Elda 24 Abril 2020
Jesús Gandía Núñez

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