1174
PEDIR POR PEDIR, ME PIDO UN MILAGRO
Camino entre albaidas y romeros,
entre avena y manzanilla florida
y me da vida el perfume que respiro;
porque es escaso mi recorrido.
¡Qué pena y qué tristeza!
¡No poder disfrutar del camino!
¡Tener la libertad restringida!
¡Porque mi cuerpo está herido!.
¡En realidad, no camino!
Me arrastro, con mi melancolía,
con mi conformismo y ¡Sobrevivo!...
gracias a recuerdos que me espolean.
Si hay algo más terrible que hacerse viejo,
es por añadidura, sentir en la cabeza pajarillos;
y a mi me cantan con cierta frecuencia:
“¡No te preocupes que esto es pasajero!”.
Pero pasan los días y pasan los meses
sin dar con la solución al problema;
solo me alivia este aroma a hierbas,
y el verde intenso que nos dejó la primavera.
Elda 17 Mayo 2020
Jesús Gandía Núñez
No hay comentarios:
Publicar un comentario