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SIGUEN LAS MALAS NOTICIAS
Amaneció mi espontaneidad
remisa
ante tanto disparate en las
noticias;
me siento como un claro en la
borrasca,
turbado por la maldad y la
codicia.
Hasta que punto llega la
desesperación,
por conseguir poder y riquezas,
que no nos detenemos ante
imprudencias
que pueden llegar a causar
tragedias.
Que no nos vuelvan locos la
envidia ni la ira,
porque suelen ser malas
compañeras,
y nos llevan por caminos de
delincuencia
que embrutecen y trastornan la
cabeza.
San Juan 5 Septiembre 2019
Jesús Gandía Núñez
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